Casa de Agnes West (Aldea Ost-In-Edhil - Elfos de la luna)

Ya habia terminado de cambiarme.
-Si, claro -.Le dije. Y Mariel entro, esperando respuestas a unas preguntas que iba a formularme. No queria responder, ya tenia sufiente con las de Sindar... Espere, paciente.

- Te noto triste Agnes. Sólo quería decirte que si ncesitas hablar con alguien puedes contar conmigo. Lo sabes, verdad?

Asenti y sonrei debilmente.
-Si, lo se... -.Desvie la vista y mi sonrisa desaparecio.- Recuerdo... que me dijiste que yo era alguien importante... que mirara en el corazon de Arandil... Que no te fallara -.Aquella frase la pronuncie en un susurro.- Mariel yo... no puedo seguir. No puedo seguir con esto. Lo siento -.Aparte el rostro a un lado.

- Por qué, mi niña? Por qué no puedes seguir? Que ha pasado?.- Le dijo, mientras se acercaba a abrazarla.

No queria admitirlo, de verdad que no. Pero tenia que hacerlo.
-Arandil... Arandil es feliz sin mi. Es mejor para los dos separarnos. El necesita olvidarme y yo olvidarle a el -.Era la unica conclusion a la que podia llegar.

- Y que te lleva a pensar eso?... Acaso el te lo ha dicho?... no creo... Creeme Agnes. Arandil no es feliz con Itiel. Y si de verdad le quieres... deberías alejarlo de ella.

-Pero... ¿Y si ella le ama tambien? No puedo ser tan cruel con una persona... -.¿No pensaria que seria capaz de hacer eso? La simple idea me resultaba horrible.

-Itiel tuvo su oportunidad de amarlo, hace muchos años, cuando Arandil hubiera dado la vida por ella. Pero eligió marcharse y robar la lágrima... y ahora ha decidido volver... a saber que tendrá planeado, pero te puedo asegurar que no es por amor por lo que ha vuelto, Agnes. Es necesario que hagamos algo,... antes de que le hagan daño a Arandil.

La mire, callada.
-Creo que esta compinchada con Morus... Estaban los dos juntos en todo momento -.Me quede pensativa un rato. Luego, la mire.- Si lo que dices es cierto... Te ayudare, Mariel, para proteger a Arandil. Pero... -.Por un momento no quise continuar.- Cuando termine todo esto... deberas darme la oportunidad de elegir... entre quedarme o marcharme... Hare lo que sea para salvar a Arandil pero... por favor, acepta esa condicion -.Le pedi. Seria lo ultimo que hiciera por el. Le ayudaria, lo salvaria de ese Morus. Pero... despues de todo... Tendria que elegir si queria seguir o... olvidarle para siempre.

- De acuerdo, yo lo único que quiero es evitar un desastre... y prteger a Arandil. Después te prometo que te dejaré decidir. Ahora vamos a dormir, Agnes, supongo que estarás cansada.- Se levantó, le dió un beso en la frente y salió de la habitación.

Me quede asi, unos momentos que parecieron eternos. Mi vida no volveria a ser la misma despues de esto. Cerre los ojos, me acoste en la cama y me quede dormida. No soñe nada aquella noche.
Y el nuevo dia... llego.

Salió de palacio temprano por la mañana para dirigirse a la cueva de Mariel. Quería hablar con Agnes, y aclarar cualquier malentendido que pudiera haber. Le diría que pensaba dejar a Itiel y así poder estar juntos para siempre. No podía borrar la sonrisa de su rostro, si, a partir de ahora todo sería distinto.

Llegó a la puerta de la cueva y llamó.

Quise preparar el desayuno ya que Mariel no aparecia por ningun lado. ¿Donde estaria? Quizas en alguna de sus habitaciones. De repente, oi el sonido de la puerta. Deje de hacer lo que estaba haciendo. ¿Deberia responder? No estaba segura. Podia ser alguien desconocido... Ayyyy ¿Que hacia? Me decidi, y fui a abrir debido a la insistencia de las llamadas. Cuando abri, no pude creer... ¿que... que hacia aqui Arandil?
-A-A-Arandil que... ¿qu-que haces aqui? -.Le mire asustada. No debia dejarle entrar, no sin permiso de Mariel. Asi que me dispuse a cerrar.- No deberias estar aqui -.Le dije.

Mariel apareció detrás de Agnes.- No te preocupes, dejale pasar. Buenos días Arandil.



- Hola Mariel. Buenos días a las dos. Agnes... podría hablar contigo... a solas?.- Le preguntó. - Podemos salir fuera si quieres.

No sabia que hacer. Mire a Mariel, buscando apoyo, pero iba a ser algo imposible. No queria quedarme a solas con el... Ya no estaba segura de nada.
-No, afuera... afuera no -.Casi iba a decir que era peligroso delante de el, y entonces sospecharia.- Ven a mi habitacion. Ahora mismo estamos contigo Mariel, y por cierto te he preparado el desayuno -.Le dije y fuimos hasta mi habitacion. Cerre la puerta detras de el. Me gire para enfrentarle.
-Bien... tu diras -.Le inste.

Se acercó a ella y le cogió las manos. -Te noto triste, Agnes. No te alegras de verme?

Mire nuestras manos. Me resultaba tan duro... Negue con la cabeza.
-Me alegra mucho verte de nuevo... -.No podia negarlo.- Pero... No ha sido muy correcto salir de palacio y arriesgarte de ese modo. Dime a que has venido -.Le dije suavemente.

-Arriesgarme a que? a que Itiel se enfade conmigo? No me importa, Agnes... sólo me importas tu. Es que no me crees?

Le mire y no pude evitar romper a llorar.
-¿Por que intentas hacer esto mas duro, Arandil? Sabes que no podemos estar juntos, que tu estas casado y tu esposa ha vuelto a tu lado, yo... yo no puedo hacer nada -.Dije entre sollozos. Maldicion... ¿por que no podia dejar de llorar? Tal vez porque esto me superaba...

Se acercó a ella y la abrazó. - No llores, amor... no quiero que llores. Estoy casado, pero no quiero a mi esposa... y hablaré con ella para arreglar las cosas.

De repente, una pregunta cruzo por mi cabeza. ¿Y que pasa si a mi tambien deja de quererme como a Itiel? La pregunta me dejo paralizada.
-Arreglarlo... ¿como? ¿Que piensas hacer, Arandil? -.Me aparte un poco para mirarle.- ¿Y que pasa si... si tambien dejas de quererme a mi?... -.En el fondo no queria pensar en la respuesta.

- Yo no soy así, Agnes. Si Itiel no se hubiera marchado... estoy seguro de que seguiría amándola. Pero me hizo mucho daño Agnes... y eso mató el amor que sentía por ella. Si tu estás conmigo... si no me abandonas... nunca dejaré de quererte.

Abandonarle... No podia hacerle eso pero... Pero es que estaba tan dolida que... Que no sabia que haria despues de ayudar a Mariel.
-¿Y como vas a arreglarlo si puedo saberlo? -.¿Podria tener una oportunidad? Pero... para ello yo tambien tenia... tenia que confiar otra vez en el. Cosa que ahora lo veia dificil.

- Esta noche hablaré con Itiel, le diré que nuestro matrimonio debe acabar. Ya no hay nada entre nosotros, Agnes. Ni siquiera dormimos en la misma habitación. Agnes... por qué no confías en mí?... cuando te he mentido?

No lo sabia. En aquel momento no queria pensar en nada...
-No me has mentido nunca... -.Pero si me has ocultado cosas, respondio mi mente.- Lo que pasa es que... Lo de la fiesta fue... un sock... Te eche de menos, sufri por no verte y aun sin recordarte me dolia el corazon. Y cuando te vi... -.Desvie la mirada.